El 11 de julio, Rajoy anunció en el Congreso de los Diputados algunas de las medidas de su segundo plan de recortes, el más brutal de la historia de la democracia.
El gobierno del PP demostró ese día tres cosas:
1) que llegó al poder mintiendo y que no le importa traicionar su palabra;
2) que su objetivo es destruir el Estado del Bienestar y someter a los trabajadores a la tiranía del capital y
3) que es un mandado de Merkel y del Banco Central Europeo.
Este es el tercer recorte que sufre el país desde el año 2010. Ninguno de los anteriores sirvió para sacarnos de la crisis sino para profundizar el pozo de miseria en el que vivimos. Tampoco servirá de nada éste, excepto para provocar más sufrimiento.
El gobierno del PP quiere hacernos creer que el problema fundamental de España es la deuda y el déficit públicos, con su letanía de que no se puede gastar lo que no se tiene.
Cuando afirma tal cosa, el PP miente, aunque con éxito, porque mucha gente se ha tragado el embuste que sirve de coartada para destruir los servicios públicos y robar al trabajador.
El problema fundamental de España es, por el contrario, que hay más de cinco millones de parados, que la economía está en recesión, que no producimos lo que necesitamos, que los sueldos no dan para vivir con un mínimo de dignidad y que, por este camino, no hay futuro ni esperanza. Para salir del pozo, hay que aplicar dos principios muy distintos al que proclama el PP:
a) no se deben devolver deudas ilegítimas y
b) no sepuede gastar si no se produce, para lo cual es necesario invertir y trabajar.
La sociedad española necesita como el comer trabajo, justicia y democracia. Sin trabajo no hay futuro, porque la única fuente real de la riqueza es el trabajo. Justicia, porque el trabajo debe estar remunerado adecuadamente, sin abusos ni explotación. Y democracia para que sea el pueblo el que se gobierne a sí mismo, siendo dueño de un destino que no debe dejar en manos de otros.
En resumen: Basta ya de que nos jodan y que los diputados del PP aplaudan entre risas los recortes de Rajoy.
Si estás de acuerdo con todo lo que has leído o si te sientes impotente, enfadado o deprimido, acude a la concentración que se celebrará el próximo día 24 de julio, en la Plaza de la Constitución (frente al Ayuntamiento), a las 20’00 horas, para decir
¡BASTA YA!
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