El Gobierno Autónomo de Galicia se ha atrevido a abrir el melón de la privatización de un servicio público esencial como es el Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento: van a reemplazar a bomberos profesionales por otros que probablemente estarán mal pagados, mal formados y mal equipados. La justificación es banal: pueden sustituir rápidamente un bombero (en caso de enfermedad, por ejemplo) por otro, como si un bombero profesional se tuviera de un día para otro.
Esto demuestra las derivas que una Administración totalmente economicista puede llegar a tomar en detrimento de un servicio cuya rentabilidad es estrictamente social y que están en la línea de:
Ir contra la totalidad del resto de los gobiernos autonómicos que han desarrollado su ley de emergencias en las que el Bombero es considerado un Agente de la Autoridad en el desempeño de sus funciones, haciendo interpretaciones muy parciales
Ir contra la totalidad del resto de los gobiernos autonómicos que han desarrollado su ley de emergencias en las que el Bombero es considerado un Agente de la Autoridad en el desempeño de sus funciones, haciendo interpretaciones muy parciales
Adoptar criterios de empresa privada, cuando en la totalidad de servicios de la Unión Europea, los cuerpos de bomberos son profesionales, dependiendo de las respectivas administraciones, Central ó locales, pero he aquí que la Xunta ha inventado la pólvora.
Ignorar completamente lo estipulado en la Ley de Protección Civil, para municipios cuyo número de habitantes supere los 20.000.
Crear empleo precario, mal formado, mal equipado y mal pagado en beneficio de las empresas privadas, esto no es nuevo.
Dotaciones insuficientes, poco personal y con criterios de rentabilidad económica no de eficacia y de eficiencia.
No querer ver que en los países donde existen bomberos privados, está política está fracasada.
Pero todo esto a la Xunta le da absolutamente igual, lo que le importa es ahorrar dinero a costa de la función pública y aun así eso está por ver. Nada les importa la mejora del servicio publico, la coordinación y comunicación entre servicios en una emergencia, nada les importa tener empleados publico bien pagados, bien formados, nada les importa tener los mejores profesionales sino los que tenga a mano, nada les importa la consideración de sus empleados por la ciudadanía, nada les importa lo que ocurre en la Unión Europea, ellos son mas listos. Nada les importa las garantías legales en las que trabajen sus empleados, solo que trabajen, nada les importa tener cubierto todo su territorio. No les importa la voz de los profesionales en contra de este proyecto, nada les importa el pensamiento de las centrales sindicales.
Ignorar completamente lo estipulado en la Ley de Protección Civil, para municipios cuyo número de habitantes supere los 20.000.
Crear empleo precario, mal formado, mal equipado y mal pagado en beneficio de las empresas privadas, esto no es nuevo.
Dotaciones insuficientes, poco personal y con criterios de rentabilidad económica no de eficacia y de eficiencia.
No querer ver que en los países donde existen bomberos privados, está política está fracasada.
Pero todo esto a la Xunta le da absolutamente igual, lo que le importa es ahorrar dinero a costa de la función pública y aun así eso está por ver. Nada les importa la mejora del servicio publico, la coordinación y comunicación entre servicios en una emergencia, nada les importa tener empleados publico bien pagados, bien formados, nada les importa tener los mejores profesionales sino los que tenga a mano, nada les importa la consideración de sus empleados por la ciudadanía, nada les importa lo que ocurre en la Unión Europea, ellos son mas listos. Nada les importa las garantías legales en las que trabajen sus empleados, solo que trabajen, nada les importa tener cubierto todo su territorio. No les importa la voz de los profesionales en contra de este proyecto, nada les importa el pensamiento de las centrales sindicales.
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